lunes, 31 de enero de 2011

Evangelio del día

2011-01-31 - Evangelio según San Marcos 5,1-20

Publicado 2011/01/31
Autor : Sagrada Biblia

Qué bondad tan grande, Señor, reservas para tus fieles, y concedes a los que a ti se acogen a la vista de todos.

Carta de San Pablo a los Hebreos 11,32-40

Hermanos: ¿Para qué seguir? No me da tiempo de referir la historia de Gedeón, Barac, Sansón, Jefté, David, Samuel y los profetas; éstos, por medio de la fe, subyugaron reinos, practicaron la justicia, obtuvieron promesas, amordazaron fauces de leones, apagaron hogueras voraces, esquivaron el filo de la espada, se curaron de enfermedades, fueron valientes en la guerra, derrotaron ejércitos extranjeros; hubo mujeres que recobraron resucitados a sus difuntos.

Pero otros fueron tundidos a golpes y rehusaron el rescate, para obtener una resurrección mejor; otros pasaron por la prueba de la flagelación ignominiosa, de las cadenas y la cárcel; los apedrearon, los serraron, murieron a espada, rodaron por el mundo vestidos con pieles de oveja y de cabra, faltos de todo, oprimidos, maltratados; el mundo no era digno de ellos: vagabundos por desiertos y montañas, por grutas y cavernas de la tierra.

Y todos éstos, aun acreditados por su fe, no consiguieron lo prometido; Dios tenía preparado algo mejor para nosotros, para que no llegaran sin nosotros a la perfección.

Salmo 30

Qué bondad tan grande, Señor, reservas para tus fieles, y concedes a los que a ti se acogen a la vista de todos.

En el asilo de tu presencia los escondes de las conjuras humanas; los ocultas en tu tabernáculo, frente a las lenguas pendencieras.

Bendito el Señor, que ha hecho por mí prodigios de misericordia en la ciudad amurallada.

Yo decía en mi ansiedad: "Me has arrojado de tu vista"; pero tú escuchaste mi voz suplicante cuando yo te gritaba.

Amad al Señor, fieles suyos; el Señor guarda a sus leales, y a los soberbios les paga con creces.

Evangelio según San Marcos 5,1-20

En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos llegaron a la orilla del lago, en la región de los gerasenos. Apenas desembarcó, le salió al encuentro, desde el cementerio, donde vivía en los sepulcros, un hombre poseído de espíritu inmundo; ni con cadenas podía ya nadie sujetarlo; muchas veces lo habían sujetado con cepos y cadenas, pero él rompía las cadenas y destrozaba los cepos, y nadie tenía fuerza para domarlo. Se pasaba el día y la noche en los sepulcros y en los montes, gritando e hiriéndose con piedras. Viendo de lejos a Jesús, echó a correr, se postró ante él y gritó a voz en cuello: "¿Qué tienes que ver conmigo, Jesús, Hijo de Dios Altísimo? Por Dios te lo pido, no me atormentes." Porque Jesús le estaba diciendo: "Espíritu inmundo, sal de este hombre." Jesús le preguntó: "¿Cómo te llamas?" Él respondió: "Me llamo Legión, porque somos muchos." Y le rogaba con insistencia que no los expulsara de aquella comarca.

Había cerca una gran piara de cerdos hozando en la falda del monte. Los espíritus le rogaron: "Déjanos ir y meternos en los cerdos." Él se lo permitió. Los espíritus inmundos salieron del hombre y se metieron en los cerdos; y la piara, unos dos mil, se abalanzó acantilado abajo al lago y se ahogó en el lago. Los porquerizos echaron a correr y dieron la noticia en el pueblo y en los cortijos. Y la gente fue a ver qué había pasado. Se acercaron a Jesús y vieron al endemoniado que había tenido la legión, sentado, vestido y en su juicio. Se quedaron espantados. Los que lo habían visto les contaron lo que había pasado al endemoniado y a los cerdos. Ellos le rogaban que se marchase de su país.

Mientras se embarcaba, el endemoniado le pidió que lo admitiese en su compañía. Pero no se lo permitió, sino que le dijo: "Vete a casa con los tuyos y anúnciales lo que el Señor ha hecho contigo por su misericordia." El hombre se marchó y empezó a proclamar por la Decápolis lo que Jesús había hecho con él; todos se admiraban.

Para leer el comentario del evangelio haz click aquí

Frase

Den gracias al Señor, porque es bueno, porque es eterno su amor.

El método preventivo de Don Bosco - I Parte

Publicado 2011/01/28
Autor: Gaudium Press
Sección: Opinión


Redacción (Viernes, 28-01-2011, Gaudium Press) Mantener la disciplina en una sala de clases, constituida por adolescentes, es una dificultad que, con algunas variantes, se muestra casi tan antigua como la civilización. Los maestros de San Agustín podrían dar un testimonio valioso a este respecto. En otros tiempos, los métodos usados eran mucho más directos que los actuales y daban resultados inmediatos, proporcionales a la energía y la fuerza de personalidad del profesor. Pero el problema de fondo no deja de ser el mismo, hoy como ayer.

La educación no se restringe a conseguir mantener, dentro del recinto de una sala de clases, todos los alumnos en orden y silencio, para que el profesor pueda transmitir con eficacia sus enseñanzas. El buen educador debe saber moldar la personalidad de sus discípulos, corrigiendo los defectos, estimulando las cualidades, haciéndolos amar los principios que orientarán la vida. En una buena educación, la formación religiosa ocupa un lugar principal, pues sin amor de Dios y auxilio de la gracia nadie consigue vencer las malas inclinaciones y practicar establemente la virtud.
De la teoría a la práctica...

En la teoría, todo eso es muy fácil... Pero, ¿cómo ponerla en práctica en el mundo de hoy, en el cual son tan numerosas y atrayentes las solicitudes para el mal y los educadores sienten creciente dificultad de ejercer influencia sobre los jóvenes?

El problema ya era candente en la época de San Juan Bosco. La sociedad de entonces pasaba por grandes transformaciones, sobre todo de mentalidad. Y la juventud, siempre ávida de novedades, se alejaba de la religión y perdía el rumbo. Don Bosco hacía el "milagro" - mucho mayor que todos los otros por él realizados- de atraer y formar jóvenes que ya no se dejaban moldar por los antiguos métodos educativos y se substraían a la acción de la Iglesia. Eran tan sorprendentes los resultados obtenidos por el fundador de los salesianos que muchos de sus compañeros intentaban insistentemente arrancar de él el "secreto" de su éxito.

Esta misma intención tuvo el rector del seminario mayor de Montpellier, cuando envió una carta a Don Bosco, preguntando cuál era el secreto de la pedagogía utilizada por él. Imagínese su sorpresa al recibir la siguiente respuesta: "Consigo de mis niños todo lo que deseo, gracias al temor de Dios infundido en sus corazones". No satisfecho, el rector envió una segunda carta, pero a ésta el Santo no supo responder, pues nunca había hecho un estudio sobre la materia. El libro del cual él quitaba sus enseñanzas era su propia vida.
Confianza: el instrumento del buen educador

Al discutir sobre el tema con el Cardenal Tosti, en Roma, en una mañana de 1858, le dijo San Juan Bosco: "Vea, Eminencia, es imposible educar bien a la juventud si no se le conquista la confianza". En seguida, para darle un ejemplo concreto, él lo invitó a acompañarlo a la Plaza del Popolo, donde fácilmente encontrarían grupos de jóvenes jugando, y podría demostrar la eficacia de su método. Pero cuando bajó del carruaje, el grupo de niños que jugaba en la plaza huyó corriendo. Ciertamente juzgaron que este padre les iba dar un pequeño sermón o reprenderlos por alguna falta. El Cardenal se quedó dentro del vehículo, viendo la escena, y se divertía, juzgando que aquel primer fracaso llevaría Don Bosco a desistir de la experiencia. Pero éste no se dejó abatir y, en pocos minutos, con su vivacidad e irresistible bondad, tenía una pequeña multitud de jovencitos a su alrededor divirtiéndose con sus juegos y entusiasmados con su bondad. Llegado el momento de retirarse, ellos formaron dos hileras delante del coche, para aclamar al sonriente sacerdote mientras pasaba. El cardenal tenía dificultad para creer lo que estaba viendo...

Evitar el pecado: la esencia del método preventivo


Al final, ¿cómo hacía San Juan Bosco para cautivar a la juventud?

Como primer objetivo, pretendía él evitar todo y cualquier tipo de pecado, usando gran vigilancia, acompañada de amorosa solicitud. No de un modo abrumador y glacial, sino paternal y afectuoso. A esta táctica de conducir a los jóvenes, el santo educador dio el nombre de "método preventivo", en contraposición con el otro entonces de moda, denominado "represivo", el cual tenía por base los castigos.

Este formador de la juventud no perdía ocasión de obstaculizar el avance del mal. Aún en los recreos, su mirada atenta en seguida conseguía descubrir dónde estaba la pelea o de dónde provenían palabras objetables y, sin demora, deshacía la confusión con hábil jovialidad, pues él era el alma de las diversiones, como sus alumnos testificaban. No pocas veces, él desafiaba a todos los niños, de una sola vez, para una corrida. Entonces erguía la sotana, contaba hasta tres y dejaba aquella turba de jóvenes para atrás: Don Bosco siempre llegaba en primer lugar. Cuando ya tenía 53 años, él todavía dejaba a los espectadores estupefactos con su agilidad, pues nunca perdía una corrida con los alumnos del Oratorio.

Por Thiago de Oliveira Geraldo

(Próximo Lunes: Suavidad en la reprensión; la frecuencia a los sacramentos)

Cardenal Rouco presentó ayer el libro "Santo Rosario" de San Josemaría Escrivá

San Josemaría EscriváPublicado 2011/01/28
Autor: Gaudium Press
Sección: Europa


Madrid (Viernes, 28-01-2011, Gaudium Press) El cardenal Antonio María Rouco Varela, arzobispo de Madrid, estuvo al frente de la presentación ayer de la edición crítico-histórica de "Santo Rosario", libro que San Josemaría Escrivá escribió en 1931, y que ha sido traducido a 29 idiomas.

La presentación tuvo lugar en la Iglesia del Real Monasterio de Santa Isabel, en Madrid, sitio donde el santo siendo capellán, escribió "un tirón" el libro, tras celebrar misa en diciembre de 1931.

El libro ha alcanzado la impresión de 1.300.000 ejemplares. Tiene ediciones en gujerati (India), quechua, swahili y tagalog. Las más recientes son en esloveno y árabe. La edición que se presenta ha sido preparada por Pedro Rodríguez, director, Constantino Anchel y Javier Sesé, investigadores de la Universidad de Navarra.

"Santo Rosario" tuvo una primera edición en 1934. En la mente del San Josemaría, tiene como propósito acercar al fiel a la Virgen María, y a través de Ella, a la Trinidad, pues "el principio del camino que tiene por final la completa locura por Jesús es un confiado amor hacia María Santísima", en las palabras del Santo.

Con información de SIC.

La leyenda del Barrilito - cuentos para niños

Cuenta una antigua leyenda que en los confines de Normandía habitaba un arrogante caballero, cuyo nombre causaba terror en toda la región. De gran estatura y bello porte, era vanidoso, desleal y cruel, no temiendo ni a Dios ni a los hombres.
No hacía ayuno ni abstinencia, no asistía a Misa ni oía sermones, no se conocía hombre tan malo como él.

—Preparad para el almuerzo el jabalí que ayer cacé— gritó a sus cocineros un Viernes Santo.
Oyendo esto sus vasallos exclamaron:
—Señor, hoy todos ayunan... ¿Y Vos queréis comer carne? Creednos, Dios terminará por castigaros.
—Hasta que eso ocurra, habré robado y ahorcado a mucha gente— respondió.
—¿Estáis seguro que Dios soportará esas ofensas?
Deberíais arrepentiros sin demora, señor. En un bosque vecino habita un monje, varón de gran santidad.
Vamos hasta allá y confesémonos —insistieron los vasallos.
—¿Confesarme? ¿Yo? ¡Jamás! — respondió con desprecio el caballero.
—Venid al menos a hacernos compañía.
—Para divertirme, concedo. Pero por Dios, nada haré.

Y pusiéronse en camino. En medio del bosque solitario y quieto, encontraron en la ermita al santo varón. Todos entraron y se confesaron, el hidalgo ateo ni se apeó del caballo. Avisado por los penitentes, el eremita salió al encuentro de ese orgulloso, que permaneció montado, diciéndole:
—Sed bienvenido señor. Visto que sois caballero, debéis ser cortés. Desmontad y venid a hablar conmigo.
—¿Hablar con vos? ¿Por qué diablos? Estoy con prisa.
—Entrad y conoced mi capilla y mi morada.
Muy a contragusto y rezongando, el caballero se apeó. El monje lo tomó por el brazo, lo condujo delante del altar y le dijo:
—Señor, matadme, si quisieres, pero de aquí no saldréis sin antes confesaros.
—¡No contaré nada! No sé que me impide mataros.
—Hermano, decidme un solo pecado. Dios os ayudará a confesar los demás...
—¡Diablos! ¿No me daréis sosiego? Lo haré, pero de nada, de nada me arrepentiré.
Y con gran arrogancia contó de un solo lance todos sus numerosos pecados.
—Señor, por lo menos sujetaos a una penitencia
—dijo el santo monje.
—¿Qué? ¿Penitencia?
¿Os burláis de mí? —vociferó furioso el caballero.
—Ayunaréis todos los Viernes durante tres años.
—¡Tres años! Estás loco. ¡Jamás!
—Entonces, un mes.
—Tampoco.
—Iréis a una iglesia y diréis allí un Padre Nuestro y un Ave María.
—Para mí sería molesto, y además tiempo perdido.
—Entonces, ya que sois tan arrogante y os halláis tan grande y poderoso, por lo menos cogeréis este barrilito, lo llenaréis en el arroyo próximo y me lo traeréis de regreso.
—Bien, esto no me cuesta nada, y, para librarme de vos, concedo.

Salió pues el caballero en dirección al riachuelo y de un solo golpe hundió en el agua el barrilito. Entretanto, en éste no entró ni siquiera una gota... Intentó nuevamente, de una forma y de otra... ¡Nada!
Intrigado y rechinando los dientes de rabia, volvió a la ermita y reclamó:
—¡Barril embrujado! ¡No consigo meterle ni una gota de agua! —¡Señor, que triste estado es el vuestro! Un niño lo habría traído desbordando... Esto es una señal de Dios, por causa de vuestros pecados – dijo el monje. — Pues yo os juro que no regresaré a mi castillo en cuanto no llene este barril, aunque tenga que darle la vuelta al mundo. ¡Y en esto empeño mi palabra! Y así partió el caballero con el barrilito, llevando sólo la ropa que tenía puesta. En todos los pozos y fuentes, cascadas y ríos, lagos y mares, experimentaba llenar el pequeño tonel, pero siempre en vano. Caminando sin cesar por planicies y montañas, con frío o calor, recorrió muchos países. Harapiento y sucio, curtido por el sol, obligado a mendigar, sufrió hambre, insultos y burlas, pues muchos desconfiaban de él. Su cuerpo se iba agotando y el barrilito le pesaba enormemente, amarrado al cuello. Después de dos años de intentos fallidos, decidió volver a la Ermita, donde por fin llegó, exactamente el Viernes Santo. El monje no reconociéndolo, preguntó:
—Querido hermano, ¿quién os dio este barrilito? Hace dos años lo entregué a un bello caballero, que nunca regresó. No sé si aún vive.
—¡Ese caballero soy yo y este es el estado en que
me colocasteis! —respondió lleno de cólera el
desgreñado andariego, que contó a continuación
sus desventuras.
El santo hombre se indignó ante tanta dureza
de corazón y exclamó:
—¡Vos sois el peor de los hombres! Un perro
o cualquier otro animal habría llenado el barril. ¡Ah!
Bien veo que Dios no aceptó vuestra
penitencia, porque no os arrepentisteis.
Y, poniéndose a llorar, rogó a la Santísima Virgen
que intercediese por aquel pecador empedernido.
En cuanto el monje sollozaba en su larga oración,
el caballero, quieto, fue tocado por la gracia. Su duro
corazón se conmovió. Los ojos se le turbaron.
Una gruesa lágrima rodó por la mejilla reseca, cayendo en el barrilito, que traía amarrado al cuello.
¡Y esta única lágrima fue suficiente para llenarlo hasta el borde! Sinceramente arrepentido, pidió confesión.
El monje, maravillado, lo abrazó con lágrimas de alegría. Reconciliado con Dios, el caballero volvió a su castillo y llevó una santa vida a partir de ese día, siendo ejemplar para todos sus siervos y los habitantes de la región. Y quedó conocido como el caballero del barrilito.

viernes, 28 de enero de 2011

El gusto por los buenos modales resurge

Publicado 2011/01/26
Autor: Gaudium Press
Sección: Opinión

Redacción (Miércoles, 26-01-2011, Gaudium Press) Mucho se ha dicho sobre las buena maneras, atribuyéndoles como principal inconveniente la falta de sinceridad en la relación mutua.

Desde París nos llega la noticia (1) de que volvieron ellas a ser bien vistas en general por la población.

Otrora ocupaban ellas un papel preponderante en la vida social. El movimiento libertario de mayo de 1968 en Francia tuvo como empeño barrerlas en gran parte de la sociedad. Enseñar a los niños a tener reglas de educación equivalía a quebrar de forma culposa la espontaneidad de sus personalidades.

Algunos centros de información decían que la reprensión dificultaba el potencial creativo de los jóvenes, como de hecho, también, a los menos jóvenes...

Sin embargo, esa opinión es errónea. Al evitar a alguien practicar lo indeseable, en realidad se le está ayudando a transitar sin impedimento el camino del bien. Tal será, por ejemplo, el caso del policía que detiene el intento del suicida; impidiendo el mal, lo llevó al bien, por la preservación de su vida.

O el caso del anciano que necesita de la barandilla para subir la empinada escalera. Apoyándose en ella no va a debilitar su personalidad, sino por el contrario dará señal de lucidez por la elección de un medio a su alcance para llegar a la meta que tiene en vista, cual es, la de subir a un piso superior.

Pero a veces cuesta percibir las cosas obvias

Entretanto, "chassez le naturel et il reviendra au galop" (expulsad lo que es natural y él regresará al galope), dicen los franceses. El galope, en el caso de las buenas maneras, llevó casi cerca de medio siglo, pero acabó hasta cierto punto, haciéndose escuchar.

Informa la referida noticia de La Croix que las guías de buenas maneras se venden hoy como panecillos.

Portarse bien en la mesa vuelve a ser de buen tono. ¿Quién diría?

El arte de bien recibir es difundido hoy por una de las páginas web de cocina más populares (2), que contiene normas relativas a la disposición de cubiertos, vasos, y vinos en las mesas.

Sin manifestar un apego a las cuestiones de protocolo, las indicaciones tienen en cuenta ciertas reglas naturales, tales como, por ejemplo, dejar el lugar de mayor precedencia a las personas a quienes queremos rendir homenaje de una forma especial.

La cortesía parece estar volviendo al gusto del día

Bertrand Buffon, jefe de gabinete de un centro para la inversión internacional -continúa informando La Croix- acaba de publicar un ensayo titulado "El gusto de la cortesía" en el que declara que "dada la ascensión de las incivilidades -término extraño, dice él, que evita hablar de la desaparición de la cortesía- se ha comenzado a tener consciencia de que el hombre, naturalmente sociable, necesita de la cortesía para ser feliz y crecer".

Dominique Picard, psico-socióloga y autora de dos libros sobre este tema explica que, "fundamentalmente la cortesía es el aceite que se pone en las coyunturas de las relaciones sociales, es lo que nos permite vivir juntos, respetándonos unos a otros. Se sabe que no es posible vivir de acuerdo a la espontaneidad. Al despertar en la mañana de mal humor no podemos responder a un vecino que nos saluda: "¡No me moleste!"

- Es la razón por la cual declaramos que tenemos mucho placer en conocer a alguien que nos es presentado, incluso aunque no tengamos ningún encanto en ello. Importa que tengamos disponibilidad social para convivir.

Resume la psico-socióloga que "las normas de cortesía permiten que las personas vivan juntas en el respeto mutuo, sin colocarlas en posición incómoda".

Es evidente que las reglas de la cortesía son el fruto de la cultura de las personas que las generan. Dominique Picard cita como ejemplo el hecho de que en Europa cuando un niño habla a un adulto, debe mirarlo a la cara, mientras que en Asia la regla es que baje los ojos. Así, la manera de mostrar respeto por alguien varía entre estos dos mundos, pero el principio fundamental que se quiere afirmar es el mismo: exteriorizar el respeto que se tiene por ciertas personas.

Para más allá de la diversidad de formas de ser, lo que importa conocer son los principios fundamentales que rigen las relaciones mutuas.

En términos católicos, el respeto mutuo que es practicado por la cortesía es ley fundamental, establecida por Dios mismo, al mandarnos amar "también a nuestro prójimo como a nosotros mismos". El interés por las almas de los demás lleva a tratarlos bien siempre que tengamos la ocasión, para poder aproximarlos más a su finalidad eterna, que es conocer a Dios.

Por Guy de Ridder

A María, Madre de Misericordia



Oh Reina soberana, digna Madre de Dios!

El conocimiento de mi vileza y la multitud de mis pecados debieran quitarme el ánimo de acercarme a Vos y llamaros Madre.

Pero aunque es tanta mi infelicidad y miseria, es mucho también el consuelo y confianza que siento en llamaros Madre.

Merezco, bien lo sé, que me desechéis; pero humildemente os ruego que miréis lo que hizo y padeció vuestro divino Hijo, y entonces, si podéis, despedidme.

Es cierto que no hay pecador que haya ofendido tanto como yo a la divina Majestad: pero estando el mal ya hecho, ¿qué recurso me queda sino acudir a Vos que podéis ayudarme? Sí, Madre mía, ayudadme.

No digáis “no puedo” porque sois omnipotente y alcanzáis de Dios todo cuanto queréis. No respondáis tampoco “no quiero”, o bien decidme a quien he de acudir pidiendo el remedio de mi desventura.

A Vos y a vuestro Hijo os diré con San Anselmo: Señor, compadeceos de este infeliz, y Vos Señora, intercede por mí o mostradme otros corazones más piadosos a quienes pueda recurrir con más confianza.

Pero ¡ah!, que ni en la Tierra ni en el Cielo se encuentra quien tenga de los desdichados más compasión, ni quien mejor los pueda socorrer. Vos, Jesús mío, sois mi Padre; Vos dulce María, sois mi Madre. Cuanto más infelices somos los pecadores, más nos amáis y con mejor solicitud nos buscáis para salvarnos.

Yo soy reo de muerte eterna, yo soy el más miserable de todos los hombres; pero con todo, no es menester buscarme, ni es esto lo que ahora pretendo, pues voluntariamente corro a vuestros pies. Aquí me tenéis; no seré desdichado, no quedaré confundido; Jesús mío, perdonadme; Madre mía, interceded por mí.


(Extraído del libro Las Glorias de María . San Alfonso María de Ligorio. Sevilla: Apostolado Mariano, 1984, pp. 66-67)

Modelo para San Juan...y para Judas - cuentos para niños

Queriendo representar la Última Cena, un pintor dedicó varios años a la busca de modelos para Jesús y los doce Apóstoles.
Su preocupación era retratar en las fisonomías, de manera perfecta, la psicología y el carácter de cada personaje del cuadro. Jesús debería personificar la inocencia, la bondad y la belleza. Naturalmente,
fue el modelo más difícil de encontrar. Debía ser un hombre en la plenitud de la edad y de la fuerza, exento de cualquier marca de pecado.
Tarea nada sencilla, en que gastó cerca de dos años de afanosa búsqueda.
Por fin, exultante, encontró a su “Jesús”. Luego de seis meses, estaba lista la figura principal de la atrevida obra. Ardua labor fue también conseguir modelos para los demás apóstoles.
San Pedro, con su carácter un tanto áspero, pero fogoso, sincero y leal; Santiago el mayor, llamado “hijo del trueno”, físicamente parecido a Jesús, del que era primo; Santo Tomás, con su aire de incredulidad y duda... y así. Largos años empleó el artista en este trabajo. San Juan y Judas fueron dejados para el final; tal vez para realzar mejor la diferencia entre el Apóstol virgen y el asqueroso traidor.

Joven con fisonomía de ángel

Al cabo de pocos años había concluido la primera parte del trabajo.
Ahora la cuestión era hallar un modelo para el “discípulo que Jesús amaba”. Cierto día divisó a un joven con fisonomía angelical. Su mirada reflejaba la pureza virginal, la inocencia y la rectitud de carácter del San Juan imaginado por el pintor. Con mucho tiento, el artista le expuso su proyecto y le ofreció el honroso papel. Su primera reacción fue de espanto: “¿Yo sirviendo de modelo para un santo?! ¡Lejos de mí!”. Pero cuando le explicaron la finalidad del cuadro y el bien que podría hacer, terminó por aceptar y acompañó al pintor a su taller. Finalizado el trabajo, este exclamó contento:
“Ecco! Abbiamo San Giovanni!”
– “¡Listo, tenemos a San Juan!”.

Demorosa búsqueda de Judas


En esos tiempos ser bueno era bonito; y feo ser malo. Por eso costaba encontrar a alguien tan depravado, codicioso y vil para servir como modelo del que cometió el crimen de vender un Dios por 30 monedas. Corrían los años y el pintor miraba apesadumbrado el cuadro incompleto.
Pero daba gracias a Dios por no encontrar a Judas en su ciudad. Resignado, hasta pensaba dejar vacante el lugar del traidor. Un día cualquiera, pasando cerca de una taberna, vio a un hombre cuyo rostro le pareció la figura misma de la avaricia, la traición y el crimen. Sintiendo un escalofrío de horror, el artista se dijo a sí mismo: “¡Este es el hombre! No me cabe duda que traicionaría a su mejor amigo”. Había encontrado al modelo para Judas.
Durante considerable tiempo ese ser horrendo posó en silencio, mientras veía formarse en la tela su fisonomía. Cuando el artista le daba la última pincelada a su obra, el monstruoso modelo comenzó a llorar convulsivamente hasta que, por fin, le preguntó:
– ¿No te acuerdas de mí?
– ¡Nunca te había visto!– respondió el sorprendido artista.
–Mírame otra vez. ¡Soy el joven que hace siete años tomaste como modelo para representar a San Juan!

¿Habrá restauración para mí?

Después, elevando los ojos al cielo, el miserable exclamó: “¡Oh Dios! ¡¿Cómo pude caer tan bajo?!”. Notando que el piadoso artista lo miraba con ojos de compasión, le preguntó:
– ¿Qué debo hacer para salir de mi triste estado?
– ¡Basta con querer! Es preciso confiar en la bondad del Sagrado Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María. El mayor pecado de Judas no fue traicionar a su Maestro, sino el desconfiar de su infinita misericordia. Habría sido perdonado si le hubiera rezado a la Virgen: “Acuérdate Madre
piadosísima, que nunca se oyó decir que alguno, habiendo recurrido a tu protección e implorado tu socorro, fuera desamparado por ti... ¡Intercede por mí! ¡Que no sea el primero en ser abandonado!”. La Virgen Santísima, la celestial pintora, puede borrar los trazos de Judas que el pecado imprimió
en tu rostro, y restaurar en él la fisonomía pura e inocente de San Juan.
Al oír esta respuesta del pintor, el hombre se retiró con los ojos aún inundados de lágrimas, dispuesto a hacer penitencia de sus pecados.
El resto de su historia, solamente Dios la conoce...

Evangelio del día

2011-01-28 - Evangelio según San Marcos 4,26-34
Publicado 2011/01/28
Autor : Sagrada Biblia

Encomienda tu camino al Señor, confía en él, y él actuará: hará tu justicia como el amanecer, tu derecho como el mediodía.

Carta de San Pablo a los Hebreos 10,32-39

Hermanos: Recordad aquellos días primeros, cuando, recién iluminados, soportasteis múltiples combates y sufrimientos: ya sea cuando os exponían públicamente a insultos y tormentos, ya cuando os hacíais solidarios de los que así eran tratados. Pues compartisteis el sufrimiento de los encarcelados, aceptasteis con alegría que os confiscaran los bienes, sabiendo que teníais bienes mejores, y permanentes. No renunciéis, pues, a vuestra valentía, que tendrá una gran recompensa. Os falta constancia para cumplir la voluntad de Dios y alcanzar la promesa. Un poquito de tiempo todavía, y el que viene llegará sin retraso; mi justo vivirá de fe, pero, si se arredra, le retiraré mi favor. Pero nosotros no somos gente que se arredra para su perdición, sino hombres de fe para salvar el alma.

Salmo 36

Confía en el Señor y haz el bien, habita tu tierra y practica la lealtad; sea el Señor tu delicia, y él te dará lo que pide tu corazón.

Encomienda tu camino al Señor, confía en él, y él actuará: hará tu justicia como el amanecer, tu derecho como el mediodía.

El Señor asegura los pasos del hombre, se complace en sus caminos; si tropieza, no caerá, porque el Señor lo tiene de la mano.

El Señor es quien salva a los justos, él es su alcázar en el peligro; el Señor los protege y los libra, los libra de los malvados y los salva porque se acogen a él.

Evangelio según San Marcos 4,26-34

En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente: "El reino de Dios se parece a un hombre que echa simiente en la tierra. Él duerme de noche y se levanta de mañana; la semilla germina y va creciendo, sin que él sepa cómo. La tierra va produciendo la cosecha ella sola: primero los tallos, luego la espiga, después el grano. Cuando el grano está a punto, se mete la hoz, porque ha llegado la siega."

Dijo también: "¿Con qué podemos comparar el reino de Dios? ¿Qué parábola usaremos? Con un grano de mostaza: al sembrarlo en la tierra es la semilla más pequeña, pero después brota, se hace más alta que las demás hortalizas y echa ramas tan grandes que los pájaros pueden cobijarse y anidar en ellas." Con muchas parábolas parecidas les exponía la palabra, acomodándose a su entender. Todo se lo exponía con parábolas, pero a sus discípulos se lo explicaba todo en privado.

Para leer el comentario del evangelio haz click aquí

Papa pone a Juana de Arco como ejemplo para los políticos modernos en situaciones difíciles

Publicado 2011/01/26
Autor : Gaudium Press

Falta de caridad y de humildad substrae de los teólogos la capacidad de ver la santidad en una persona, observó Benedicto XVI al hablar de Santa Juana de Arco

Ciudad del Vaticano (Miércoles, 26-01-2011, Gaudium Press) Santa Juana de Arco es un "bello ejemplo de santidad para los laicos comprometidos en la vida política, principalmente en las situaciones más difíciles", dijo el Papa en la audiencia general de hoy, dedicada a la figura de la santa francesa del siglo XV. Este miércoles, en la Sala Pablo VI del Vaticano, estuvieron presentes 3 mil participantes para ver y escuchar al Santo Padre.

Según Benedicto XVI, la vida de Santa Juana de Arco es una invitación para una medida alta de la vida cristiana. Vivió en tiempos difíciles y dramáticos para la Iglesia, y de la gran cisión de Occidente. Ella nació en 1412, cuando había un Papa y dos 'anti-Papas', y en medio de la Guerra de los Cien Años entre Francia e Inglaterra. El Pontífice explicó que la francesa es un ejemplo político actual porque, desde joven, la santa demostró una gran caridad y compasión por los más pobres, los enfermos y todos los sufridores.

El fenómeno de Juana de Arco es la "ligación entre experiencia mística y misión política", uno de los aspectos de su santidad, dijo. Antes de la actividad pública pasó un período de vida de reflexión y de madurez interior. Para Benedicto XVI, ella y Catalina de Siena son modelos de "dos jóvenes mujeres del pueblo, laicas y consagradas en la virginidad; dos místicas empeñadas, no en el claustro, sino en medio de las realidades más dramáticas de la Iglesia y del mundo de su tiempo".

La condena a muerte, vivida por la santa francesa con heroísmo, en un juzgamiento guiado por teólogos "a los cuales faltaron la caridad y la humildad de ver en esta joven la acción de Dios", jueces "incapaces de ver su santidad y de ver la belleza de su vida", dijo el Pontífice, que resaltó: "Juana de Arco murió a los diecinueve años, pronunciando en voz alta el nombre de Jesús, centro de toda su vida".

Al final de la audiencia el Papa saludó a los presentes en varias lenguas, como lo hace habitualmente, entre ellas portugués y español, y en seguida se encontró con los fieles en la Sala Nervi.

Frase

Hoy sabréis que viene el Señor, y mañana contemplaréis su gloria.

miércoles, 26 de enero de 2011

PENSAMIENTOS DE MADRE TERESA : LA ORACIÓN

La oración ensancha el corazón, hasta hacerlo capaz de contener el don de Dios. Sin Él, no podemos nada. Orar a Cristo es amarlo y amarlo significa cumplir sus palabras. La oración significa para mí la posibilidad de unirme a Cristo las 24 horas del día para vivir con Él, en Él y para Él.

Para leer el artículo completo haz click aquí

Diario de un penitente - cuentos para niños

En los países europeos, es muy común que las personas —desde las más elevadas, hasta simples campesinos— registren en un cuaderno los acontecimientos, las reflexiones o impresiones que más les llamaron la atención. Esos diarios constituyen, inclusive, una preciosa fuente de informaciones para los estudiosos, sobre todo los que se dedican a escribir lo que los franceses llaman de la petite histoire (la pequeña historia).
Hace más de diez años, oí de un ilustre conferencista brasileño la narración del hecho abajo transcrito, leída por él en un libro de un escritor francés.

Como turista inteligente, caminaba tranquilamente ese escritor por las calles de Roma, la “Ciudad Eterna”, sin un plan preconcebido, “sintiendo” los lugares densos en cultura y tradiciones, analizando los grandiosos monumentos, las pintorescas calles y plazas. Caminando, por así decir, sin rumbo, pasó por una de las innumerables iglesias de la ciudad pontificia y notó al acaso, grabada en la piedra, una inscripción que le despertó la curiosidad.
“¿Será el memorial del arquitecto que construyó el sagrado edificio? ¿O será obra de algún vándalo?” —pensó él.
Se aproximó, y desde el primer momento notó el detalle de la letra artísticamente diseñada. Leyó la primera frase:
“Hoy, 25 de agosto, pequé. Pero, gracias a Dios, ya me confesé”. Emocionado, el escritor constató que la inscripción era el “diario espiritual” de un pecador arrepentido y decidido a marcar en la piedra, para todos los siglos, su testimonio de lucha, humildad y gratitud. Seguía un igual gemido del alma: “Hoy, 26 de agosto, volví a pecar. Pero ya me confesé, gracias a Dios”.
Se sucedían así las frases, siempre iguales en la sustancia, con ligeras variaciones en la forma. Pero con un detalle importante: a medida que pasaba el tiempo, iba quedando mayor el período entre una caída y otra. De casi cotidianas al principio, pasaron a ser semanales, mensuales. Después, varios meses sin pecar. Por fin, nuestro turista-escritor llegó a su última frase, un verdadero grito de victoria y gratitud: “Hoy, 13 de marzo, hace un año que no peco. ¡Alabado sea Dios!”
Conmovido hasta las lágrimas, tuvo él deseos de arrodillarse y besar aquella reliquia de un alma que, en lugar de desanimar al considerar su flaqueza, confió en la misericordia de Dios, perseveró en la oración, por la cual obtuvo las gracias abundantes para luchar con éxito hasta alcanzar la victoria completa. Bendito, ciertamente, es la sangre de los mártires derramada en el Coliseo y en tantos otros lugares de la Tierra.
Benditas también las confesiones grabadas en ese “diario” de piedra, las cuales nos traen vivamente a la memoria el libro “Confesiones”, del gran Doctor de la Iglesia, San Agustín.

En el Ángelus, Papa habla de los 4 "ejes" para alcanzar la unidad entre los hombres

Publicado 2011/01/24
Autor: Gaudium Press
Sección: Europa

Ciudad del Vaticano (Lunes, 24-01-2011, Gaudium Press) La escucha de la Palabra de Dios, la comunión fraterna, la Eucaristía y la oración, son los cuatro "ejes" para alcanzar la unidad entre los hombres, y para los cristianos son una vía para dar testimonio al mundo. Fue lo que recordó Benedicto XVI en el Ángelus, tradicionalmente proferido desde la ventana de su oficina privada cada domingo. El Pontífice habló también sobre el sufrimiento de los cristianos en Tierra Santa y Oriente Medio.

El Santo Padre antes de la recitación de la oración mariana habló sobre el tema de la unidad a los cristianos, por ocasión de la Semana de Oración para la Unidad de los Cristianos. La tradicional semana, que concluye el próximo 25 de enero, en la fiesta de conversión del Santo Apóstol Pablo, con las vísperas presididas por el Papa en la Basílica de San Pablo Extramuros, en Roma.

"Sabemos -observó el Santo Padre- cuántas pruebas deben enfrentar los hermanos y las hermanas de Tierra Santa y Oriente Medio. Su servicio es, entonces, aún más precioso, que se torna más valioso por un testimonio que, en ciertos casos, llegó hasta al sacrificio de la vida".

También los cristianos que viven en los territorios tranquilos son llamados a vivir según los cuatro "ejes". La escucha de la Palabra de Dios, la comunión fraterna, la Eucaristía y la oración; que permiten a la Iglesia cumplir de manera eficaz su misión. Una unidad visible y plena entre los cristianos recuerda el serio compromiso de conversión a Cristo.

Evangelio del día

2011-01-26 - Evangelio según San Lucas 10,1-9
Publicado 2011/01/26
Autor : Sagrada Biblia

En aquel tiempo, designó el Señor otros setenta y dos y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir él.

Segunda Carta de San Pablo a Timoteo 1,1-8

Pablo, apóstol de Cristo Jesús por designio de Dios, llamado a anunciar la promesa de vida que hay en Cristo Jesús, a Timoteo, hijo querido; te deseo la gracia, misericordia y paz de Dios Padre y de Cristo Jesús, Señor nuestro. Doy gracias a Dios, a quien sirvo con pura conciencia, como mis antepasados, porque tengo siempre tu nombre en mis labios cuando rezo, de noche y de día. Al acordarme de tus lágrimas, ansío verte, para llenarme de alegría, refrescando la memoria de tu fe sincera, esa fe que tuvieron tu abuela Loide y tu madre Eunice, y que estoy seguro que tienes también tú. Por esta razón te recuerdo que reavives el don de Dios, que recibiste cuando te impuse las manos; porque Dios no nos ha dado un espíritu cobarde, sino un espíritu de energía, amor y buen juicio. No te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor y de mí, su prisionero. Toma parte en los duros trabajos del Evangelio, según la fuerza de Dios.

Salmo 95

Cantad al Señor un cántico nuevo, cantad al Señor, toda la tierra; cantad al Señor, bendecid su nombre. Proclamad día tras día su victoria. Contad a los pueblos su gloria, sus maravillas a todas las naciones.

Familias de los pueblos, aclamad al Señor, aclamad la gloria y el poder del Señor, aclamad la gloria del nombre del Señor.

Decid a los pueblos: "El Señor es rey, él afianzó el orbe, y no se moverá; él gobierna a los pueblos rectamente."

Evangelio según San Lucas 10,1-9

En aquel tiempo, designó el Señor otros setenta y dos y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir él. Y les decía: "La mies es abundante y los obreros pocos; rogad, pues, al dueño de la mies que mande obreros a su mies. ¡Poneos en camino! Miras que os mando como corderos en medio de lobos. No llevéis talega, ni alforja, ni sandalias; y no os detengáis a saludar a nadie por el camino. Cuando entréis en una casa, decid primero: "Paz a esta casa." Y, si allí hay gente de paz, descansará sobre ellos vuestra paz; si no volverá a vosotros. Quedaos en la misma casa, comed y bebed de lo que tengan, por que el obrero merece su salario. No andéis cambiando de casa. Si entráis en un pueblo y os reciben bien, comed los que os pongan, curad a los enfermos que haya, y decid: "Está cerca de vosotros el reino de Dios.""

San Francisco de Sales: Patrono de los Periodistas

Publicado 2011/01/24
Autor: Gaudium Press
Sección: Espiritualidad

Redacción (Lunes, 24-01-2011, Gaudium Press) Doctor de la Iglesia, y conocido también como Obispo de Ginebra, la Iglesia católica conmemora hoy a San Francisco de Sales, quien también es Patrono de los periodistas y escritores.

Originario del castillo de Sales, en Saboya -nació el 21 de agosto de 1567 -, y bautizado al día siguiente como Francisco de Buenaventura, siempre fue un inquieto por los asuntos de Dios. Cuentan que de niño le gustaba ir al templo y orar mirando siempre al altar y compartía las enseñanzas del catecismo -que su madre le impartía- a los otros niños con quienes se encontraba.

Siendo un adolescente -entre los 13 y 14 años - va a París donde estudia filosofía, teología y retórica. Desde entonces, el joven ya tenía en su corazón el deseo de ser sacerdote, pero se ve obligado a ocultarle a su padre sus aspiraciones, quien quería que Francisco siguiese una carrera secular. Su sueño de ser sacerdote se hizo realidad en 1593, al ser ordenado presbítero, ejerciendo desde entonces su sacerdocio con gran dedicación. Francisco tomó como modelo a San Francisco de Asís.

Entre sus múltiples habilidades, quien es hoy Doctor de la Iglesia, fue conocido por su gran habilidad como escritor, pero especialmente por decir la verdad sin lastimar a las personas, así como por su pericia dando a conocer la verdad evangélica, mostrando que todo lo auténticamente humano es cristiano.

Entre sus obras se destaca el "Tratado del Amor de Dios", de donde se recuerda la conocida frase: "La medida del amor es amar sin medida", y el libro "Introducción a la Vida Devota".

San Francisco de Sales, junto a Santa Juana de Chantal, funda la Congregación de la Visitación, de monjas de clausura. Fue canonizado el 19 de abril de 1665 por el Papa Alejando VII.

lunes, 24 de enero de 2011

La imagen del espejo

Sor María Pureza del Inmaculado Corazón había sido una religiosa piadosa y observante de su regla. Entró en el convento siendo aún muy niña, con tan sólo 15 años, por una autorización extraordinaria del obispo.

Allí vivió más de seis décadas y toda la comunidad la respetaba de manera especial, y hoy es venerada como una auténtica santa. Su historia es muy interesante y bonita.

Había nacido en el seno de una familia acomodada y su nombre de bautismo era Magdalena María. La única niña entre cinco varones; su madre estaba embelesada con la pequeña; su padre también había mostrado predilección por la que llamaba “mi princesita”.

Ahora bien, todo esto le hizo ser muy vanidosa. Se pasaba horas delante del espejo, peinando sus largos cabellos, rubios y crespos, alisando sus finas cejas o simplemente contemplando sus enormes ojos azules.

Creció muy mimada por su familia, incluso por sus hermanos, recibiendo elogios por su innegable belleza: ¡Qué niña tan linda! ¡Qué muñequita! ¡Si parece una princesa…!

Magdalena se volvió orgullosa, arrogante y egoísta. A veces se acordaba de las clases de Catecismo preparatorias para la Primera Comunión, en las que había aprendido que la belleza más grande de una persona es la que refleja la humildad del alma y la pureza del corazón. Sin embargo, el espejo seguía atrayéndole… y de inmediato apartaba esos buenos pensamientos para caer nuevamente en la más intensa vanidad.

Una noche, no obstante, tuvo una pesadilla. Soñó que estaba admirándose como de costumbre en el espejo y, de pronto, su imagen se transformaba en la figura de un ángel que la miraba de manera severa. Escuchó, asustada, una voz fuerte que le dijo:

— Magdalena... Magdalena...

¿Por qué te preocupas tanto por tu apariencia? ¡El espejo es tu peor enemigo!

La niña se apartó de aquel objeto antes tan atrayente, pero no podía dejar de mirar la imagen que se había fijado allí. Y el ángel continuó diciendo, esta vez con una fisonomía más amena:

— Magdalena, si quieres ser bonita, ¡sé pura! ¡La pureza es la fuente de toda belleza!

Y desapareció…

La pequeña se despertó sofocada…

¿Qué es lo que había pasado? Fue en busca del espejo y se miró, ¡sólo vio su propia imagen! Entendió, desde lo hondo de su alma, cómo su orgullo y vanidad le iban a llevar por el mal camino.

Al día siguiente, se dispuso a visitar a las monjas del monasterio de su ciudad, para pedirles una orientación.

La madre superiora la acogió amablemente y le recomendó que tuviera mucha devoción a la Virgen, Reina de los Ángeles y Madre Purísima, pues nadie en la Tierra había sido tan hermosa como Ella, justamente por su pureza virginal.

Magdalena tomó en serio el consejo de la religiosa y su vida cambió de manera radical. Se volvió humilde y diligente, ayudaba a todos los que a ella acudían, y únicamente se miraba en el espejo lo necesario para estar presentable. Nacía así en su corazón el deseo de reparar sus anteriores faltas. Decidió ser religiosa e hizo el propósito de no mirarse nunca más en un espejo.

Tras vencer diversos obstáculos, entre ellos la incomprensión de sus padres y su corta edad, hecho que merecía una autorización especial, consiguió entrar, por fin, en las paredes benditas del monasterio, donde anhelaba llevar una vida pura, humilde y virtuosa, y donde en ninguna celda había espejos…

Recibió el nombre de Sor María Pureza del Inmaculado Corazón y cumplió su propósito con perfección.

Obediente y con recogimiento, cuando su función consistía en ir a por agua a la fuente para la cocina, lo hacía con los ojos cerrados, para no ver el reflejo de su imagen en el agua. O si le era asignada lavar la ropa del convento, evitaba mirarse en las grandes pilas de la lavandería.

Su devoción a la Santísima Virgen era notoria. Continuamente la veían rezando a los pies de las bellas imágenes de María que había en la capilla o en el claustro, especialmente ante la del Inmaculado Corazón.

Siempre discreta y amable con las otras monjas, su presencia marcaba la vida comunitaria. Por eso, después de pasados muchos años, sus hermanas la respetaban porque era un modelo de santidad.

Ella no se daba cuenta, pero su fisonomía, por la práctica de la virtud, se había hecho más bonita todavía.

Su rostro poseía una luminosidad antes inexistente y sus grandes ojos azules, espejos de su alma pura, adquirieron una nueva profundidad, haciéndose más hermosos y atrayentes.

Los años no consiguieron deteriorar su juvenil lozanía, reflejo de un interior virtuoso.

Su salud, no obstante, empezaba a debilitarse con el tiempo. Continuaba desempeñando sus funciones, sin preocuparse de sí misma, y cumpliendo sus obligaciones con esmero y amor. Hasta que encontrándose ya sin fuerzas se vio obligada a guardar reposo en la enfermería. Se acercaba la hora de rendirle cuentas a Dios.

La Hna. María Pureza presentía que su muerte ya estaba llegando. Con fiebre y extenuada, les pedía algo a las monjas, arrodilladas a su cabecera, que no lograban entender.

Pensaban que estaría delirando y rezaron la oración de los agonizantes. Pero la enferma seguía balbuceando cortas palabras.

Finalmente una joven religiosa creyó comprenderla:

— Por lo visto, ¡parece que quiere un espejo!

— ¿Un espejo?, exclamaron todas.

¿Cómo una persona que había vivido tantos años huyendo de ese objeto, podía pedirlo en la hora de su muerte?

Sin intuir siquiera el motivo de tan inusitado pedido, la superiora decidió atender el deseo de la pobre moribunda. Mandó que buscaran un espejo y lo puso en las manos de la enferma.

Cuando la Hna. Pureza sintió el peso del objeto, sus ojos se abrieron, levantó la cabeza y esbozó una enorme sonrisa. Aquel espejo, milagrosamente, no reflejaba la fisonomía de la agonizante, sino el rostro luminoso de María Santísima. Había venido a buscar el alma de aquella que, desapegándose de su propia belleza, se había hecho digna de contemplar las maravillas celestiales.

Minuto con María - Esperanzas y aprensiones


Pidamos la intercesión de María Dolorosa para que así como el buen ladrón, nos arrepintamos de nuestras miserias y alcacemos el Cielo.
Para ver el video completo haz click aquí

Evangelio del día

2011-01-24 - Evangelio según San Marcos 3,22-30
Publicado 2011/01/24
Autor : Sagrada Biblia

Cantad al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas: su diestra le ha dado la victoria, su santo brazo.

Carta de San Pablo a los Hebreos 9,15.24-28

Hermanos: Cristo es mediador de una alianza nueva: en ella ha habido una muerte que ha redimido de los pecados cometidos durante la primera alianza; y así los llamados pueden recibir la promesa de la herencia eterna.

Pues Cristo ha entrado no en un santuario construido por hombres -imagen del auténtico-, sino en el mismo cielo, para ponerse ante Dios, intercediendo por nosotros. Tampoco se ofrece a sí mismo muchas veces -como el sumo sacerdote, que entraba en el santuario todos los años y ofrecía sangre ajena; si hubiese sido así, tendría que haber padecido muchas veces, desde el principio del mundo-. De hecho, él se ha manifestado una sola vez, al final de la historia, para destruir el pecado con el sacrificio de sí mismo. Por cuanto el destino de los hombres es morir una sola vez. Y después de la muerte, el juicio. De la misma manera, Cristo se ha ofrecido una sola vez para quitar los pecados de todos. La segunda vez aparecerá, sin ninguna relación al pecado, a los que lo esperan, para salvarlos.

Salmo 97

Cantad al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas: su diestra le ha dado la victoria, su santo brazo.

El Señor da a conocer su victoria, revela a las naciones su justicia: se acordó de su misericordia y su fidelidad en favor de la casa de Israel.

Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios. Aclamad al Señor, tierra entera; gritad, vitoread, tocad.

Tañed la cítara para el Señor, suenen los instrumentos: con clarines y al son de trompetas, aclamad al Rey y Señor.

Evangelio según San Marcos 3,22-30

En aquel tiempo, los escribas que habían bajado de Jerusalén decían: "Tiene dentro a Belzebú y expulsa a los demonios con el poder del jefe de los demonios." Él los invitó a acercarse y les puso estas parábolas: "¿Cómo va a echar Satanás a Satanás? Un reino en guerra civil no puede subsistir; una familia dividida no puede subsistir. Si Satanás se rebela contra sí mismo, para hacerse la guerra, no puede subsistir, está perdido. Nadie puede meterse en casa de un hombre forzudo para arramblar con su ajuar, si primero no lo ata; entonces podrá arramblar con la casa. Creedme, todo se les podrá perdonar a los hombres: los pecados y cualquier blasfemia que digan; pero el que blasfeme contra el Espíritu Santo no tendrá perdón jamás, cargará con su pecado para siempre." Se refería a los que decían que tenía dentro un espíritu inmundo.

viernes, 21 de enero de 2011

Campaña del Fondo Misericordia ayuda a víctimas de las inundaciones en Río de Janeiro

Publicado 2011/01/20
Autor: Gaudium Press
Sección: América


San Pablo (Miércoles, 19-01-2011, Gaudium Press) Con una larga trayectoria en la ayuda a los más necesitados, la Campaña del Fondo Misericordia, dirigida por los Heraldos del Evangelio, lanzó de norte a sur del territorio brasileño una campaña de pedido y colecta de ayuda para los damnificados por las fuertes lluvias ocurridas en la región serrana de Río de Janeiro. Hasta el momento, casi 700 personas han muerto a consecuencia de la tragedia.

Según los organizadores de la Campaña del Fondo Misericordia, ésta es una ocasión oportuna para el ejercicio cristiano de amor al prójimo, por amor de Dios. El recuerdo de los consejos evangélicos de las prácticas de las obras de misericordia es, más que nunca, oportuno y necesario. En este sentido, el objetivo de la colecta es llevar aliento y esperanza a los flagelados de las inundaciones, a través de la donación de agua, comida, ropa y atención médica y espiritual.

Las donaciones pueden realizarse a través del site http://ajudeasvitimasdorio.arautos.org/. Ellas serán encaminadas integralmente a las diócesis y parroquias de la región, que se encargarán de distribuir los recursos para los más necesitados.

Las contribuciones serán depositadas en una cuenta corriente del Banco Bradesco usada para auxiliar a las víctimas de las lluvias en Río de Janeiro. La contribución es hecha por boleto bancario, que posee una numeración específica y, por eso, es un método seguro que permite control de los envíos realizados en pro de las víctimas de las lluvias.

San Antonio y la mula del Hereje - cuentos para niños

Por dondequiera que pasaba, san Antonio de Padua era el flagelo de los herejes en virtud del maravilloso don con que refutaba sus objeciones y desenmascaraba sus calumnias contra la fe católica. Habiendo llegado un día a Toulouse (Francia) para combatir los errores de los enemigos de la santa Iglesia, tuvo que disputar contra uno de los más tenaces albigenses. La larga discusión terminó por recaer sobre el augusto Sacramento de la Eucaristía. Luego de grandes dificultades, el defensor del error fue reducido al silencio. Pero, si bien estaba derrotado no se había convertido; y recurrió a un argumento extremo en desafío al santo:
–Dejémonos de palabras y vayamos a los hechos. Si con algún milagro puedes probar frente a todo el pueblo que el cuerpo de Cristo está presente de verdad en la Hostia consagrada, yo renegaré de mis ideas y aceptaré las tuyas.
–Acepto el desafío –replicó enseguida san Antonio, lleno de confianza en la omnipotencia y la misericordia del Divino Maestro.

–Escucha, pues, mi propuesta: tengo una mula en mi casa. La dejaré encerrada durante tres días sin alimento alguno, y así la traeré a esta plaza. Entonces, en presencia de todos, le ofreceré una abundante cantidad de avena, y tú le presentarás eso que, según dices, es el cuerpo de Jesucristo. Si el animal hambriento abandona la comida para correr donde ese Dios que todas las criaturas deben adorar, conforme a tu doctrina, yo creeré de todo corazón la enseñanza de la Iglesia Católica.


* * *
El día fijado vino gente de todas partes. No era posible confundir la plaza en que se realizaría la gran prueba; católicos y herejes la desbordaban, presos de una expectativa fácil de imaginar. En una capilla cercana, Fray Antonio celebraba la santa Misa con angelical fervor.
Llegó entonces el albigense tirando su mula, mientras un compinche traía el alimento favorito del animal, escoltado por una multitud de herejes que auguraban su victoria.
En ese momento, san Antonio salió de la capilla portando el cáliz con el Santísimo Sacramento. La plaza quedó en silencio. Dirigiéndose a la mula, el santo clamó con fuerte voz:

–¡En el nombre y por el poder de tu Creador, el que pese a mi indignidad sostengo realmente presente en mis manos, yo te ordeno, pobre animal,
que vengas sin demora a inclinarte humildemente frente a Él, y así los herejes reconozcan que toda criatura se somete a Jesucristo, Dios Creador que el sacerdote católico tiene la honra de hacer descender sobre el altar!
Al mismo tiempo, el albigense puso el montón de avena bajo el hocico de la bestia hambrienta, incitándola a comer.
¡Oh prodigio! Sin prestar atención alguna al alimento que se le ofrecía,
sin escuchar más que la voz de Fray Antonio, el animal se inclinó ante el nombre de Jesucristo y después se arrodilló delante del Sacramento de Vida, como si lo adorara.
Al ver esto los católicos estallaron en muestras de entusiasmo, al paso que los herejes se sentían aplastados por el estupor y la confusión.

Libro-entrevista con el Papa Benedicto XVI llega a casi un millón de copias vendidas

Publicado 2011/01/21
Autor : Gaudium Press


Fue lo que informó el miércoles el diario vaticano L'Osservatore Romano."Luz del mundo" fue escrito por el periodista alemán Peter Seewald y comenzó a ser comercializado en noviembre del año pasado

Ciudad del Vaticano (Viernes, 21-01-2011, Gaudium Press) El diario vaticano L'Osservatore Romano publicó este miércoles 19, una nota respecto al éxito editorial del libro-entrevista "Luz del Mundo", realizado por el periodista alemán, Peter Seewald, con el Papa Benedicto XVI. El periódico estima que la publicación, cuya comercialización comenzó el 24 de noviembre de 2010, ya llegó a casi a 1 millón de ejemplares vendidos en todo el mundo.

De acuerdo a la información que ofrece L'Osservatore Romano, la versión italiana del libro ya agotó la primera edición de 50 mil copias. El periódico informó también que la edición de lengua inglesa, con 100 mil copias, la francesa, con 80 mil copias, y la alemana, con 200 mil copias, alcanzaron el mismo éxito. El diario afirmó, asimismo, que el éxito será mayor, pues hay negociaciones para publicar la obra en 11 idiomas más.

Para el Padre Giuseppe Costa, director de la Librería Editora Vaticana, responsable por la publicación, tamaño logro se debe al tono usado por el Pontífice en el libro. En entrevista al diario vaticano, el sacerdote afirmó que Benedicto XVI empleó un lenguaje simple, directo y coloquial para responder preguntas complejas referentes a varios aspectos de la vida cristiana, sin nunca esquivarse. Para el director de la Librería Editora Vaticana, este tono hizo del libro un texto diferente, capaz de fascinar incluso a los no-cristianos.

En la entrevista a L'Osservatore Romano, el Padre Giuseppe Costa habló también respecto al libro "Jesús de Nazaret", del Papa Benedicto XVI. Conforme el sacerdote, la segunda parte de la publicación sobre la vida de Cristo debe ser presentada el próximo mes de marzo. El director de la Librería Editora Vaticana reveló ya haber enviado el texto a los varios editores de la obra, y haber cerrado "veinte acuerdos" editoriales para su publicación en varias lenguas.

El libro sobre la vida del Mesías comenzó a ser redactado por Benedicto XVI en las vacaciones de 2003, antes de ser electo Papa. El primer volumen de la obra, dedicado a la vida de Cristo desde el Bautismo hasta la Transfiguración, fue publicado en el 2007. El segundo volumen del libro será dedicado a la "Pasión y Resurrección" de Jesús. La obra tendrá también una tercera parte, que está por ser escrita por el Pontífice. Este volumen abordará los llamados "Evangelios de la Infancia", sobre los primeros años de la vida de Cristo.

Evangelio del día

2011-01-21 - Evangelio según San Marcos 3,13-19
Publicado 2011/01/21
Autor : Sagrada Biblia

La misericordia y la fidelidad se encuentran, la justicia y la paz se besan; la fidelidad brota de la tierra, y la justicia mira desde el cielo.

Carta de San Pablo a los Hebreos 8,6-13

Ahora a nuestro sumo sacerdote le ha correspondido un ministerio tanto más excelente, cuanto mejor es la alianza de la que es mediador, una alianza basada en promesas mejores. En efecto, si la primera hubiera sido perfecta, no tendría objeto la segunda.

Pero a los antiguos les echa en cara: "Mirad que llegan días -dice el Señor-, en que haré con la casa de Israel y con la casa de Judá una alianza nueva; no como la alianza que hice con sus padres, cuando los tomé de la mano para sacarlos de Egipto. Ellos fueron infieles a mi alianza, y yo me desentendí de ellos -dice el Señor-. Así será la alianza que haré con la casa de Israel después de aquellos días -oráculo del Señor-: Pondré mis leyes en su mente y las escribiré en sus corazones; yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo. Y no tendrá que enseñar uno a su prójimo, el otro a su hermano, diciendo: "¡Conoce al Señor!", porque todos me conocerán, del menor al mayor, pues perdonaré sus delitos y no me acordaré ya de sus pecados."

Al decir "alianza nueva", dejó anticuada la anterior; y lo que está anticuado y se hace viejo está a punto de desaparecer.

Salmo 84

Muéstranos, Señor, tu misericordia y danos tu salvación. La salvación está ya cerca de sus fieles, y la gloria habitará en nuestra tierra.

La misericordia y la fidelidad se encuentran, la justicia y la paz se besan; la fidelidad brota de la tierra, y la justicia mira desde el cielo.

El Señor nos dará la lluvia, y nuestra tierra dará su fruto. La justicia marchará ante él, la salvación seguirá sus pasos.

Evangelio según San Marcos 3,13-19

En aquel tiempo, Jesús, mientras subía a la montaña, fue llamando a los que él quiso, y se fueron con él. A doce los hizo sus compañeros, para enviarlos a predicar, con poder para expulsar demonios. Así constituyó el grupo de los Doce: Simón, a quien dio el sobrenombre de Pedro, Santiago el de Zebedeo y su hermano Juan, a quienes dio el sobrenombre de Boanerges -Los Truenos-, Andrés, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Santiago el de Alfeo, Tadeo, Simón el Celotes y Judas Iscariote, que lo entregó.

miércoles, 19 de enero de 2011

Anita y las mariposas - cuentos para niños

Anita era, según sus padres, una ni­ña feliz. Ella no siempre estaba de acuerdo.

Su padre y su madre la querían mucho… pero ambos trabajaban y la niña sólo los veía de noche. Las pro­fesoras de la escuela eran muy exi­gentes. Su hermano mayor había si­do un buen compañero de juegos, pe­ro después creció y se desinteresó de ella.

Y por fin, estaba su abuela. Ella sí le prestaba mucha atención, era muy cariñosa, respondía con calma todas sus preguntas, sabía hacer dulces y, mejor que todo, le contaba cuentos, hermosas historias de castillos fabu­losos, princesas, santos y milagros. Pero vivía lejos, y sólo de vez en cuando visitaba la casa de su nieta.

La abuela también le hablaba mu­cho de Dios. Enseñó a la inocente pequeña a rezar y le explicó muchas cosas interesantes de la religión. Pe­ro había algo que Anita no podía en­tender: si Dios lo puede todo y es tan bueno, ¿por qué no soluciona los problemas de todo el mundo?

“Por ejemplo –pensaba– no le costaría hacerme la vida más fácil: sería cosa que mis papás estuvieran más tiempo en casa, que la escuela pusiera menos tareas, que mi her­mano me hiciera compañía, que mi abuela viniera más veces… Pero pa­rece que Dios no quiere. ¡No entien­do! Le preguntaré a la abuela cuan­do venga.”

* * *

Anita pensaba en estas cosas mientras paseaba sola por el jardín de su casa, donde había muchas flo­res, algunos arbustos y árboles. Era el escenario de los pensamientos so­litarios de la pequeña, como tam­bién de sus pequeños hallazgos. En él descubrió con encanto un nido de pájaros, pero también recibió la pri­mera una picadura de abeja. Ahí le enseñó su hermano que las orugas se transforman en mariposas.

Al principio no le creyó, pero él colocó uno de estos insectos rastreros en un en­vase de vidrio con agujeros en la ta­pa; y un buen día ambos contempla­ron maravillados ese pequeño mi­lagro de la naturaleza, cuando den­tro del vidrio, encima de la crisálida abierta y vacía, se movía una linda mariposa de alas amarillas.

Desde entonces la niña sintió un gusto especial en observar las ma­riposas, fascinada por la misteriosa transformación de las desagradables orugas en delicadas joyas voladoras. Escudriñaba los arbustos hasta en­contrar las crisálidas y las visitaba todos los días, deseosa por asistir a la “salida” de cada una de ellas. Pe­ro nunca supo llegar en el momen­to exacto.

Un día tuvo la sorpresa de descu­brir un capullo adherido al tallo de una flor en la jardinera justo bajo su ventana. “¡Qué bueno! ¡Aquí mis­mo! ¡A ésta la podré seguir de cer­ca todas las mañanas sin salir de mi cuarto!” Con esa ilusión se levanta­ba todos los días un poco más tem­prano, siguiendo atentamente el de­sarrollo de “su” futura mariposa. Y una soleada mañana de domingo, cumplido el plazo, el pequeño insec­to rompió el capullo y empezó a es­forzarse por abandonar la cáscara. Todo pasaba bajo la mirada anhe­lante de Anita, que no perdía detalle del “gran acontecimiento”.

–¡Por fin voy a ver salir una mari­posa!

El animalito, sin embargo, pese al esfuerzo tenaz sólo ganaba unos cuantos milímetros en su intento. Había momentos en que se detenía, exhausto, para luego reanudar su em­peño. “¡No puede salir! ¿Qué le pa­sará?”, se preguntaba Anita.

De repente, el insecto se detuvo como derrotado, y la afligida niña, creyéndolo moribundo, se decidió a intervenir. Tomó una tijerita y cortó cuidadosamente la delicada crisáli­da. El insecto pudo salir entonces sin mayores problemas.

El sol as­cendía lenta­mente. Anita esperaba con ansias que las alas de la ma­riposa, dobla­das y arrugadas, se fueran alisan­do y extendien­do. Pero no. Pasa­do un lapso con­siderable de tiempo tuvo que bajar corriendo a desayunar, comió rápida­mente y volvió al cuarto, pa­ra verificar decepcionada que “su” mariposa sólo se había movido de un tallo a otro, mientras sus alas se­guían tristemente plegadas…

Poco más tarde llegó su hermano, y ella le contó lo sucedido.

–¿No lo sabías? Justamente el esfuerzo del insecto por salir del ca­pullo es lo que impulsa la sangre a las alas, forzándolas a abrirse. Al comienzo las alas están mojadas y flexibles, pero después de secarse quedan rígidas. Como tu mariposa no hizo ese esfuerzo, no le crecie­ron las alas, y ahora que ya se se­caron…

–¿O sea que nunca volará?– inte­rrumpió la asustada niña.

–No. Nunca volará.

Anita estalló en lágrimas y su her­mano se alejó meneando la cabeza y refunfuñando: “¡Estas cosas de mu­jeres…!” De hecho, el pobre insec­to deambuló algunos días en la jardi­nera y desapareció. Si cayó al jardín o fue sorprendido por algún pájaro, nadie lo pudo saber.

* * *

Algunos días después la abuela vino de visita. Anita le contó la tris­te historia de la mariposa y también sus dudas sobre la bondad de Dios, que podría resolver fácilmente los problemas de todos pero no parecía querer hacerlo.

–¡Pero si una cosa explica la otra! –exclamó la buena anciana, abra­zándola – Me preguntas por qué Dios parece no querer ayudar a la gente… Es que así les permite su­frir un poco, que se esfuercen y re­cen para obligar sus “alas” a abrir­se, como las mariposas. Quienes huyen siempre de los sufrimientos y no se esfuerzan en vencer las di­ficultades se quedan como maripo­sas sin alas, arrastrándose por la vi­da.

–¡Ah, ya entiendo…!

–Y Dios, en su sabiduría, permi­tió que tu pobre bichito se queda­ra sin volar para enseñarte una gran lección a ti, Anita, a quien ama más que todas las mariposas del mundo. Cuando tengas sufrimientos y difi­cultades que vencer, ya sea en la ca­sa o en el colegio, acuérdate de la mariposa: Dios quiere que pasemos por eso para tener alas grandes y bonitas con que volar a lo largo de nuestras vidas.

–¡Claro! Dios sabe lo que hace. Nunca más me quejaré de la vida– concluyó la niña, entendiendo bien las sabias palabras de la abuela.

–Y no llores más por tu maripo­sa. En el Paraíso, Jesús tiene otras mucho más bonitas que mostrarte. ¿Quién sabe si allá la vuelves a en­contrar?

Anita entonces, ya consolada de su pena, miró al jardín y susurró con tierna inocencia: “Adiós mariposita mía. ¡Hasta el Paraíso!”

Evangelio del día

2011-01-19 - Evangelio según San Marcos 3,1-6
Publicado 2011/01/19
Autor : Sagrada Biblia

El Señor lo ha jurado y no se retractará: "Tú eres sacerdote para siempre, a la manera de Melquisedec".

Carta a los Hebreos 7,1-3.15-17.

Este Melquisedec, que era rey de Salém, sacerdote de Dios, el Altísimo, salió al encuentro de Abraham cuando este volvía de derrotar a los reyes y lo bendijo; y Abraham le entregó la décima parte de todo el botín. el nombre de Melquisedec significa, en primer término, "rey de justicia" y él era, además, rey de Salém, es decir, "rey de paz".

De él no se menciona ni padre ni madre ni antecesores, ni comienzo ni fin de su vida: así, a semejanza del Hijo de Dios, él es sacerdote para siempre. Y esto se hace más evidente aún, si se tiene en cuenta que este nuevo sacerdote, a semejanza de Melquisedec, se constituye, no según la disposición de una ley meramente humana, sino según el poder de una vida indestructible.

De él se ha atestiguado: Tú eres sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec.

Salmo 110

De David. Salmo. Dijo el Señor a mi Señor: "Siéntate a mi derecha, mientras yo pongo a tus enemigos como estrado de tus pies".

El Señor extenderá el poder de tu cetro: "¡Domina desde Sión, en medio de tus enemigos!".

"Tú eres príncipe desde tu nacimiento, con esplendor de santidad; yo mismo te engendré como rocío, desde el seno de la aurora".

El Señor lo ha jurado y no se retractará: "Tú eres sacerdote para siempre, a la manera de Melquisedec".

Evangelio según San Marcos 3,1-6

Jesús entró nuevamente en una sinagoga, y había allí un hombre que tenía una mano paralizada. Los fariseos observaban atentamente a Jesús para ver si lo curaba en sábado, con el fin de acusarlo. Jesús dijo al hombre de la mano paralizada: "Ven y colócate aquí delante".

Y les dijo: "¿Está permitido en sábado hacer el bien o el mal, salvar una vida o perderla?". Pero ellos callaron. Entonces, dirigiendo sobre ellos una mirada llena de indignación y apenado por la dureza de sus corazones, dijo al hombre: "Extiende tu mano". El la extendió y su mano quedó curada.

Los fariseos salieron y se confabularon con los herodianos para buscar la forma de acabar con él.

Beatificación de Juan Pablo II será el día 1º de mayo, Domingo de la Divina Misericordia

Publicado 2011/01/14
Autor : Gaudium Press


El anuncio fue hecho esta mañana en una rueda de prensa en el Vaticano por el portavoz, Padre Federico Lombardi, después de la firma del Papa Benedicto XVI del decreto sobre el milagro atribuido a Juan Pablo II

Ciudad del Vaticano (Viernes, 14-01-2011, Gaudium Press) Después de la confirmación de la beatificación de Juan Pablo II, con la firma del Papa Benedicto XVI ratificando el decreto sobre milagro atribuido a su antecesor, el Vaticano anunció la fecha de la ceremonia: 1º de mayo, domingo de la Divina Misericordia.

El anuncio fue hecho esta mañana, en una concurrida rueda de prensa, por el portavoz del Vaticano, Padre Federico Lombardi. Realizada el 2º Domingo de Pascua, la Divina Misericordia es una fiesta instituida y "fundamental" para Juan Pablo II; de ahí la elección de la fecha para la ceremonia de beatificación.

"El rito de beatificación del Venerable Siervo de Dios Juan Pablo II - declara el Padre Lombardi - tendrá lugar en el Vaticano, el día 1º de mayo de 2011, II Domingo de Pascua, de la Divina Misericordia, presidido por el Sumo Pontífice Benedicto XVI".

La Divina Misericordia fue una devoción central y fundamental del pontificado wojtyliano. Juan Pablo II, en 1980, escribió una encíclica sobre la Divina Misericordia, "Dives in Misericordia". Durante la canonización de Santa Faustina Kowalska, Juan Pablo II instituyó que el primer domingo después de la Pascua será celebrado como Domingo de la Divina Misericordia. En su último viaje a su tierra natal, Polonia, el 17 de agosto de 2002, cuando visitó el santuario de Lagiewniki, Juan Pablo II confió todo el mundo en oración a la Divina Misericordia.

Aún no fue establecida la fecha de su memoria litúrgica. El cuerpo tampoco será expuesto al público durante la ceremonia de beatificación; será, como ya fue noticiado, dispuesto bajo el altar de la Capilla de San Sebastián, con una simple lápida de mármol con las palabras "el beato Juan Pablo II". La Capilla de San Sebastián es la segunda a la derecha en la entrada de la Basílica Vaticana.

El Padre Lombardi resaltó en la rueda que, hasta el momento, no se considera la exposición del cuerpo de Juan Pablo II. Tampoco fueron confirmadas informaciones sobre las reliquias que serán usadas en la ceremonia.

El proceso de beatificación de Juan Pablo II, abierto el 28 de junio de 2005 - apenas tres meses después de su muerte - duró cinco años y seis meses.

lunes, 17 de enero de 2011

El hombre no puede vivir sin rezar

"El hombre no puede vivir sin rezar, de la misma manera que no puede vivir sin respirar.
No son pocas las veces en que podemos ser tentados de pensar que Dios no nos oye o no nos responde.
Aunque, como San Agustín sabiamente nos recuerda, Dios conoce nuestros deseos aún antes de que los manifestemos."

(SS. Juan Pablo II)

Minuto con María - Por encima de los Ángeles y Santos

Que la Santísima Virgen nos obtenga gracias para que alcancemos la plenitud de nuestra misión en la Tierra para establecer el Reino de la Paz.

Para ver el video haz click aquí

Evangelio del día

2011-01-17 - Evangelio según San Marcos 2,18-22
Publicado 2011/01/17
Autor : Sagrada Biblia


Tampoco se pone vino nuevo en odres viejos, porque hará reventar los odres, y ya no servirán más ni el vino ni los odres. ¡A vino nuevo, odres nuevos!".

Carta de San Pablo a los Hebreos 5,1-10.

Todo Sumo Sacerdote es tomado de entre los hombres y puesto para intervenir en favor de los hombres en todo aquello que se refiere al servicio de Dios, a fin de ofrecer dones y sacrificios por los pecados. El puede mostrarse indulgente con los que pecan por ignorancia y con los descarriados, porque él mismo está sujeto a la debilidad humana.

Por eso debe ofrecer sacrificios, no solamente por los pecados del pueblo, sino también por los propios pecados. Y nadie se arroga esta dignidad, si no es llamado por Dios como lo fue Aarón. Por eso, Cristo no se atribuyó a sí mismo la gloria de ser Sumo Sacerdote, sino que la recibió de aquel que le dijo: Tú eres mi Hijo, yo te he engendrado hoy.

Como también dice en otro lugar: Tú eres sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec. El dirigió durante su vida terrena súplicas y plegarias, con fuertes gritos y lágrimas, a aquel que podía salvarlo de la muerte, y fue escuchado por su humilde sumisión.

Y, aunque era Hijo de Dios, aprendió por medio de sus propios sufrimientos qué significa obedecer. De este modo, él alcanzó la perfección y llegó a ser causa de salvación eterna para todos los que le obedecen, porque Dios lo proclamó Sumo Sacerdote según el orden de Melquisedec.

Salmo 110

De David. Salmo. Dijo el Señor a mi Señor: "Siéntate a mi derecha, mientras yo pongo a tus enemigos como estrado de tus pies". El Señor extenderá el poder de tu cetro: "¡Domina desde Sión, en medio de tus enemigos!".

"Tú eres príncipe desde tu nacimiento, con esplendor de santidad; yo mismo te engendré como rocío, desde el seno de la aurora". El Señor lo ha jurado y no se retractará: "Tú eres sacerdote para siempre, a la manera de Melquisedec".

Evangelio según San Marcos 2,18-22

Un día en que los discípulos de Juan y los fariseos ayunaban, fueron a decirle a Jesús: "¿Por qué tus discípulos no ayunan, como lo hacen los discípulos de Juan y los discípulos de los fariseos?". Jesús les respondió: "¿Acaso los amigos del esposo pueden ayunar cuando el esposo está con ellos? Es natural que no ayunen, mientras tienen consigo al esposo.

Llegará el momento en que el esposo les será quitado, y entonces ayunarán. Nadie usa un pedazo de género nuevo para remendar un vestido viejo, porque el pedazo añadido tira del vestido viejo y la rotura se hace más grande.

Tampoco se pone vino nuevo en odres viejos, porque hará reventar los odres, y ya no servirán más ni el vino ni los odres. ¡A vino nuevo, odres nuevos!".

Frase

Renovaos en la mente y en el espíritu y vestíos de la nueva condición humana.

Papa firma decreto sobre milagro y Juan Pablo II será beatificado

Publicado 2011/01/14
Autor: Gaudium Press
Sección: Europa


Ciudad del Vaticano (Viernes, 14-01-2010, Gaudium Press) El camino para la beatificación de Juan Pablo II está definido. En la mañana de hoy, el Papa Benedicto XVI firmó el decreto confirmando el milagro atribuido al Venerable Papa polaco en la causa de su beatificación. Así, la beatificación de Juan Pablo II, al lado de la de la Madre Teresa de Calcuta, entra a la historia como una de las más célebres -la apertura de la causa tuvo inicio antes de los cinco años después de la muerte del Siervo de Dios, al contrario de lo que rige la normatividad de la Iglesia-.

En una audiencia con el Cardenal Angelo Amato, prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos, este viernes, el Papa Benedicto XVI aprobó decretos para la causa de diversos religiosos. Entre estos, estaba el milagro atribuido por la intercesión del Papa polaco a la cura de una monja francesa que sufría de Mal de Parkinson, la misma enfermedad que Karol Wojtyla combatió durante toda la vida.

Un comunicado emitido hoy por la Sala de Prensa de la Santa Sede informa que la Sesión Ordinaria de los Cardenales y Obispos de la Congregación para la Causa de los Santos emitió un parecer unánime y afirmativo sobre la milagrosa cura de la religiosa, después de que los tradicionales trámites de comprobación del milagro fueron completados, a través de comisiones de médicos, teólogos y religiosos, el pasado 11 de enero; por tanto "(...) la cura de la hermana Marie Pierre Simon, realizada por Dios de modo científicamente inexplicable, por la intercesión del Sumo Pontífice Juan Pablo II, fervorosamente invocado tanto por la propia religiosa como por diversos otros fieles", afirma el trecho del comunicado del Vaticano.

El Papa Ratzinger reservó para sí la ceremonia y el anuncio de la beatificación de su "venerado predecesor". Después de alteraciones en las reglas de los ritos y un retorno a la antigua costumbre de que los pontífices no presiden las ceremonias de beatificación, sino un delegado en su nombre, Benedicto XVI quiso hacer dos excepciones. Juan Pablo II será el segundo beato hecho por él, después del Cardenal John Henry Newman.

Su "amigo" y predecesor pontífice será declarado beato por el propio Benedicto XVI, que a inicios del pontificado de Juan Pablo II había ejercido su ministerio en el más importante dicasterio de la Curia romana, como prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe.

Ya en la homilía de las exequias de Juan Pablo II, en el 2005, el entonces Cardenal Ratzinger concluía: "Podamos estar seguros de que nuestro amado Papa está ahora en la ventana de la casa del Padre, nos ve y nos bendice. Sí, bendíganos, Santo Padre. Nosotros confiamos su querida alma a la Madre de Dios, su Madre, que lo guió cada día y que lo guiará ahora en la gloria eterna de Su Hijo, Jesucristo nuestro Señor".

viernes, 14 de enero de 2011

La familia: Formadora en los valores humanos y cristianos

Publicado 2011/01/13
Autor: Gaudium Press
Sección: Espiritualidad

Redacción (Jueves, 13-01-2011, Gaudium Press) Uno de los principales desafíos que la familia cristiana enfrenta es el de formar la consciencia moral de los hijos, en una época en la cual los valores morales van siendo diluidos. Esto torna mucho más importante que nunca que los hijos sean educados en el amor a la verdad objetiva - basada en la naturaleza humana y en la ley revelada -, la justicia, la caridad y la pureza de cuerpo y alma.

Difícilmente los más jóvenes sabrán resistir a la ola hedonista y relativista sin el aprendizaje en familia, el ejemplo y el apoyo de los padres. Urge, por tanto, recolocar la familia en su debido contexto, como lugar principal y privilegiado de formación y educación, transmisora de virtudes y valores.

La Exhortación Apostólica Familiaris Consortio hace referencia a la enseñanza de Santo Tomás de Aquino, para resaltar la alta misión de los padres a este propósito. "El deber educativo recibe del sacramento del matrimonio la dignidad y la vocación de ser un verdadero y propio ‘ministerio' de la Iglesia al servicio de la edificación de sus miembros. Tal es la grandeza y el esplendor del ministerio educativo de los padres cristianos, que Santo Tomás no duda en compararlo al ministerio de los sacerdotes:

Algunos propagan y conservan la vida espiritual con un ministerio únicamente espiritual: es la tarea del Sacramento del Orden; otros lo hacen en relación a la vida corporal y espiritual lo que se realiza con el Sacramento del matrimonio, que une el hombre y la mujer para que tengan descendencia y la eduquen para el culto de Dios. [1]

Es en el hogar, y solamente allí, que se pueden desarrollar "algunos valores fundamentales que son imprescindibles para formar ciudadanos libres, honestos y responsables, por ejemplo, la verdad, la justicia, la solidaridad, la ayuda al débil, el amor a los otros por sí mismos, la tolerancia, etc.".

De poco servirá que los gobiernos se preocupen en desarrollar la enseñanza, dotar las escuelas de equipamientos sofisticados y caros e invertir en la formación de profesores, sin antes buscar fortalecer la institución de la familia. Difícil será, sin la ayuda de ella, combatir la criminalidad, la corrupción y tantos otros males.

La superación de todos los problemas de la sociedad moderna -sea a nivel psicológico, sea en el social o político- está condicionada, como vimos, a la revitalización de su célula básica: la familia.

Sin embargo, todos los esfuerzos y las iniciativas humanas por hacer reflorecer esta institución serán insuficientes sin que las bendiciones y la Gracia de Dios se posen sobre ella.

Solo con la ayuda de gracias íntimamente ligadas al Sacramento del Matrimonio, la familia podrá cumplir su importante misión en esta Tierra y preparar para el Cielo las almas de aquellos que la componen.

Así lo recordó el Papa Benedicto XVI en la clausura del V Encuentro Mundial de las Familias, celebrado en Valencia, España: "La familia cristiana -padre, madre, hijos- está llamada a cumplir los objetivos señalados no como algo impuesto de afuera, sino como un don de la gracia del Sacramento del matrimonio infundida en los esposos. Si ellos permanecen abiertos al Espíritu y piden su ayuda, Él no dejará de comunicarles el amor de Dios Padre manifestado y encarnado en Cristo. La presencia del Espíritu ayudará a los esposos a no perder de vista la fuente y medida de su amor y entrega, y a colaborar con Él para reflejarlo y encarnar en todas las dimensiones de su vida. De esta forma, el Espíritu suscitará en ellos el anhelo del encuentro definitivo con Cristo en la casa de su Padre y nuestro Padre". [2]

Por el P. Mariano Antonio Legeren, EP
_________

1 Juan Pablo II, Exortación Apostólica Familiaris Consortio, n. 38.
2 Benedicto XVI, Homilía por ocasión del V Encuentro Mundial de las Famílias, 9/7/2006.