sábado, 6 de noviembre de 2010

"Purificación y reforma deben ser las respuestas a las pruebas y los sufrimientos dentro de la Iglesia", dice el Papa

Publicado 2010/11/04
Autor : Gaudium Press


Benedicto XVI presentó un mensaje por el cuarto centenario de canonización de San Carlos Borromeo, en el cual apunta la necesidad de renovación dentro de la Iglesia

Ciudad del Vaticano (Jueves, 04-11-2010, Gaudium Press) En un mensaje por ocasión del cuarto centenario de canonización de San Carlos Borromeo, dirigido al arzobispo de Milán, cardenal Dionigi Tettamanzi, Benedicto XVI volvió a hablar hoy de renovación dentro de la Iglesia, comenzando por la conversión. "También en nuestros días no faltan en la comunidad eclesial pruebas y sufrimientos, y ella se muestran necesitadas de purificación y reforma", escribió el Papa, en el texto divulgado por la Sala de Prensa de la Santa Sede.

La canonización de San Carlos Borromeo sucedió el día 1° de noviembre de 1610. En el texto, Benedicto XVI pide "que el ejemplo de San Carlos nos estimule a comenzar siempre de un serio empeño de conversión personal y comunitario, para transformar los corazones, creyendo con certeza en la potencia de la oración y la penitencia". El Pontífice destaca "un ejemplo espléndido" de Carlos Borromeo de cómo hacer la reforma de la Iglesia y renovarla de los desórdenes y los errores.

Según Benedicto XVI, una "seria y creíble" reforma en la Iglesia, siguiendo el ejemplo de San Carlos, debe comenzar por los pastores. San Carlos fue ordenado sacerdote a los 25 años, y dos años después ya era nombrado obispo de Milán. La "Reforma" fue iniciada en él mismo, abandonando las riquezas y comodidades de su familia noble y dedicándose a la oración, la penitencia y el incansable servicio a los más pobres y necesitados, explicó el Pontífice.

Un "continuo camino de purificación ascética y perfección cristiana" lo llevó a vivir la santidad todos los días en la centralidad de la Eucaristía, el ejercicio de las virtudes evangélicas de la pobreza, la humildad y la castidad; y en la fidelidad al Sumo Pontífice. Él consiguió sintetizar en sí el empeño de penitencia y santidad al tiempo que era un "meticuloso legislador" y un "genial organizador", puntualizó también el Papa.

Para Benedicto XVI, la "extraordinaria obra de reforma" fue realizada por San Carlos Borromeo "en total fidelidad al mandato del Concilio de Trento", y "la obediencia pronta y filial" es garantía de "verdadera y plena comunión eclesial". En el mensaje, Benedicto XVI recordó los deberes de los pastores y animó a los jóvenes a responder a la vocación sacerdotal y religiosa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario