Stress... palabra-talismán que justifica muchos de los males de nuestro tiempo. ¿No duerme bien? Tiene stress. ¿En su trabajo permanece nervioso o intranquilo? Ud. Está stressado. ¿Problemas familiares? Por supuesto, la culpa es también del stress. Incluso, el mal genio, como es popularmente conocido el temperamento colérico, encuentra su justificación en el stress . Si bien es cierto que la vida agitada e insegura de hoy realmente provoca stress, éste no puede ser el escudo detrás del cual se esconde quien no quiere combatir sus defectos temperamentales.
Veamos el ejemplo de un hombre de fuerte temperamento, el cual, con el auxilio de la gracia, supo dominarse hasta el punto de llegar a ser conocido y venerado por todos como el santo de la dulzura y de la amabilidad: San Francisco de Sales.
Veamos el ejemplo de un hombre de fuerte temperamento, el cual, con el auxilio de la gracia, supo dominarse hasta el punto de llegar a ser conocido y venerado por todos como el santo de la dulzura y de la amabilidad: San Francisco de Sales.
Para leer el artículo completo haz click aquí
No hay comentarios:
Publicar un comentario