Las localidades de Zungri, Tropea y Calimera de las provincias italianas de Vibo Valentia y Lecce, respectivamente, recibieron calurosamente la imagen peregrina del Inmaculado Corazón de María, que fuera acompañada por uma delegación de Heraldos del Evangelio.
La imagen de la Virgen fue trasladada en procesión entre las diversas pequeñas ciudades que visitara, siendo saludada a su paso por los habitantes, que agitaron sus pañuelos, como demostración de cariño a la celestial Peregrina.
Parroquias, hospitales, calles y plazas fueron recorridas por la imagen del Inmaculado Corazón de María.
También fue homenajeada en la Caserma dei Carabinieri de Tropea, por los policías y su capellán.
Mujeres y niños especialmente ataviados con los trajes típicos regionales dieron un marco de originalidad a este verdadero acontecimiento local.
Posteriormente la Santísima Virgen se dirigió a la provincia de Catanzaro, donde recorrería también localidades calabresas.
La imagen de la Virgen fue trasladada en procesión entre las diversas pequeñas ciudades que visitara, siendo saludada a su paso por los habitantes, que agitaron sus pañuelos, como demostración de cariño a la celestial Peregrina.
Parroquias, hospitales, calles y plazas fueron recorridas por la imagen del Inmaculado Corazón de María.
También fue homenajeada en la Caserma dei Carabinieri de Tropea, por los policías y su capellán.
Mujeres y niños especialmente ataviados con los trajes típicos regionales dieron un marco de originalidad a este verdadero acontecimiento local.
Posteriormente la Santísima Virgen se dirigió a la provincia de Catanzaro, donde recorrería también localidades calabresas.
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