El jueves 4 de agosto, fiesta de San Juan Bautista María Vianney, el Santo Cura de Ars, patrono de los sacerdotes, los Obispos participaron, como lo hacen habitualmente, en la Eucaristía que se celebró en el Seminario Interdiocesano. Esta Misa fue ocasión de encuentro de los seminaristas con los sacerdotes del Clero Diocesano que se acercaron a participar de la misma.
En una Capilla colmada, la homilía estuvo a cargo de Mons. Orlando Romero, Obispo Emérito de Canelones, quien está cumpliendo este año sus Bodas de Plata episcopales. Mons. Romero participó recientemente en un retiro internacional para sacerdotes en Ars, y trajo a la celebración el aire de aquel
pueblo de Francia donde San Juan Bautista María Vianney vivió su total entrega a Dios y a su comunidad como párroco, hasta llegar a ser identificado sencillamente como "el Cura de Ars". El Obispo Emérito recordó con emoción su paso por el lugar donde el Santo preguntó a un pastorcito el camino de Ars y, luego de escuchar su respuesta, le dijo: "Tú me has mostrado el camino de Ars; yo te mostraré el camino del Cielo". Una estatua que reproduce aquel encuentro está ubicada allí. El Obispo recordó la sencillez de la casa cural, que se conserva tal cual estaba en el momento de la muerte del Santo Cura. Y junto a estos recuerdos de la visita reciente, desgranó sus reflexiones de pastor en este día tan querido para nuestro clero secular.
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